Vender y vender mucho es la bandera de todo director comercial en una empresa, sobre todo cuando se trata de un negocio o producto que intenta despegar o cuando nota que sus ventas han disminuido significativamente, se encuentran parcialmente estancadas o no son justo lo que esperaba alcanzar.
Para aumentar las ventas dentro de una empresa existen una variedad de estrategias que, como directores comerciales, podemos aplicar. La mayoría de estas estrategias pasan por una buena inversión en cuanto al aparato propagandístico de la empresa, la importancia de una buena y constante publicidad; por aquellas de fundamentación básica como atender y conocer mejor a nuestra clientela; por el objetivo trazado por nuestra empresa y sobre cómo llegar a alcanzarlo.
En el siguiente listado te presentamos una serie de alternativas y estrategias para que, como director comercial de tu empresa, en conjunto con tu equipo de ventas y el departamento de marketing, logren los resultados esperados:
1. Define objetivos
Estos deben estar enfilados con la visión de la empresa, con la estrategia comercial, y a su vez deben agrupar una serie de objetivos que brinden seguridad:
- Específicos: lo más claro y definido posible. Un negocio que se proyecte metas en cuanto a volumen y valor, sintonizar nuevos clientes, siempre. En la producción de calidad.
- Inspiradores: los objetivos empresariales suelen ser exigentes, por ello se debe conformar un equipo de comercial que motive al grupo de trabajo en general, que incentive, que inspire. Definir este objetivo resultará clave.
- Pactados: Los objetivos que se plantee la empresa han de ser discutidos y elaborados por todos. Un equipo de ventas debe acordar en conjunto un proyecto total, un fin.
2. Cómo alcanzar los objetivos
Establecer los instrumentos que nos llevarán a obtener nuestras metas comerciales. Plantearnos qué estrategias aplicaremos para realizar nuestros fines, qué plan de negocio se pondrá en marcha.
Se trata, dentro de lo ya definido, del planteamiento inicial de acción, de abordar los recursos necesarios para poner en práctica nuestro proyecto empresarial. Determinar las necesidades a nivel financiero, productivo, de personal de trabajo y de publicidad. Cuantificar y medir, siempre.
También puedes leer: Por qué necesitas una buena estrategia comercial en tu empresa.
3. Sé lo más efectivo posible
Las ventas son un sistema, un método que es básicamente diseñado para atraer de manera continua la cantidad necesaria de interesados que obtendrán nuestro producto.
Por esto, es sustancial para una empresa ser efectivo. Esto quiere decir que realmente te compren a quien estés buscando venderle, y te compre siempre. Pero, ¿cómo ser lo más efectivo posible? Aunque a muchos directores comerciales les cuesta, resulta algo sencillo: hay que hacer real lo que se proyecta. Antes de marcar el número de cualquier cliente se ha de hacer una investigación previa sobre este, indagar antes de contactar es clave. Si el vendedor está preparado se notará, y esto aumentará las probabilidades de éxito.
Para esto contamos con muchas ventajas en el mundo globalizado de hoy, entre ellas, el internet. De esta forma obtendrás datos importantes para saber a quienes debemos ofrecer nuestros servicios, nuestros productos como por ejemplo: Quién es nuestro cliente, a qué se dedica, cuáles son sus intereses y hasta conocer en qué sector se mueve.
Entre las estrategias que podemos usar para ser más efectivo en nuestras ventas encontramos la aplicación de programas inteligentes tales como:
- Sistema CRM
- Programa de puntos acumulables
- Programa de referidos
- Programa de créditos especiales
- Programa de merchandising
4. Mejorar la calidad del producto
Para vender, y vender mucho, hay que saber reinventarse. El producto o servicio que ofrecemos tiene que ser de calidad, de nivel. Esto lo logramos con insumos de excelencia o trabajando en un diseño mucho más atractivo. Hacer las cosas de una manera más eficiente, atribuir nuevas funciones, hacerlo más útil. Que nuestros potenciales clientes despierten todos sus intereses en nuestras ofertas.
- Hacer cambios en el producto, ejemplo en presentación, empaque, diseño.
- Lanzar nuevos productos al mercado, complementar a los que ya ofrecemos.
- Darle alternativas a nuestros clientes, captar otros.
- Brindar servicios adicionales.
- Aumentar la variedad en nuestros productos, siempre ofrecer más.
5. Estrategia de Marketing
Punto clave. Ya sea aumentando el número de veces el mismo medio publicitario o sumando nuevos canales de comunicación como por nombrar alguno, INTERNET.
Esta es quizás la estrategia más efectiva de todas. Nos permite ser reconocidos lo mismo que el servicio, que el producto. Finalmente, será nuestra gran herramienta para persuadir un poco más a nuestra potencial clientela.
También es fundamental que nuestra imagen siempre permanezca fresca y esto sería posible mediante el uso de mucha y variada publicidad, que esté en constante renovación garantizará gran parte del éxito buscado.
- Ofrece calidad
- Date a conocer
- Analiza a la competencia
- Conoce a tu cliente. Consigue más.
- Sé más y más efectivo
En conclusión
Es valioso reconocer como directores comerciales de una empresa que no basta sólo con lo emotivo o lo técnico, hay que apoyarse en distintas herramientas inteligentes para hacer frente a los retos que enfrentamos, como lo es por ejemplo, la planeación estratégica.
Esta planeación sirve para producir una red de comunicación completa y útil, en la que se enlazan los objetivos y equipos de trabajo. Favoreciendo la organización y la participación total.
También funciona como generador de conocimientos. Impulsa la innovación, creatividad y el desarrollo de competencias de directivos y trabajadores de la empresa. Con ella podemos ver los resultados obtenidos en distintas áreas como: ventas, participación en el mercado, crecimiento, índice de operación costo y utilidad de las acciones. Lo mismo que funciona para examinar el camino que lleva la empresa, sobre todo, hacia dónde se dirige.
Vale la pena recordarnos como directores comerciales, que la óptima productividad de una empresa no es el resultado directo de planes como este último mencionado o estrategias aplicadas al azar, sino el conjunto de decisiones eficientes que se toman desde la dirección empresarial. Saber adaptarse a las necesidades y concretar las búsquedas.
La dirección y planeación adecuada dentro de una empresa garantizan éxitos siempre.